Los huaves o ikoots de San Mateo del Mar (Oaxaca)
El MEIM se ocupa de los huaves o ikoots del estado de Oaxaca desde 1973. El territorio que habitan, caracterizado por un clima inestable, inspira su cosmogonía, mientras que la pesca es su principal fuente de sustento.
Los huaves o ikoots, en el pasado conocidos también como mareños o huazontecos, habitan la faja litoral del Golfo de Tehuantepec, en el estado de Oaxaca, y están distribuidos en cuatro centros principales (San Mateo del Mar, Santa María del Mar, San Dionisio del Mar, San Francisco del Mar) en torno a dos grandes lagunas costeras, la Laguna Superior y la Laguna Inferior. Desde 1973 la MEIM conduce sus indagaciones en la comunidad de San Mateo del Mar, el mayor de los municipios huaves (con alrededor de 15 000 habitantes), situado en un territorio llano que alterna zonas húmedas y salitrosas con zonas áridas y arenosas, típicas del ambiente de sabana. El clima de la zona se caracteriza por una división estacional neta: un periodo de lluvias intensas (desde fines de mayo hasta octubre) y otro fuertemente ventoso y árido (de noviembre a abril). Las principales actividades de subsistencia económica eran hasta época reciente la pesca de laguna, practicada por los hombres, y el comercio de los excedentes de la pesca (sobre todo camarón), manejado por las mujeres en los mercados del Istmo. La pobreza de los terrenos no ha permitido un desarrollo pleno de la agricultura y la ganadería, que no han pasado de actividades marginales, relegadas a los terrenos más occidentales del municipio.
En torno al inestable equilibrio entre territorio, meteorología y prácticas humanas gira toda la cosmología ikoots, en la que un papel central corresponde a los fenómenos atmosféricos: el rayo, el húmedo viento del sur, el huracán y los poderosos y secos vientos septentrionales. La alternación de esos fenómenos determina el ciclo ritual anual, marcado por las principales festividades católicas entre las que destacan la Virgen de la Candelaria, el Corpus Christi y el patrono San Mateo), e inspira gran parte de la rica y original narrativa mitológica. La organización política estuvo en otros tiempos estructurada según un sistema de cargos civiles y religiosos reservados a los hombres, obligatorios los jerárquicamente inferiores y electivos los del vértice, con obligaciones rituales importantes. Recientemente también las mujeres han sido admitidas al electorado, tanto activo como pasivo, y fuertes presiones económicas y políticas exógenas sobre los recursos del territorio han interferido con la gestión democrática del poder, generando tensiones y episodios cruentos.
La industrialización del área meridional del Istmo, el incremento de la movilidad hacia el interior, del trabajo asalariado y de la comercialización de la artesanía textil, el acceso de muchos ikoots de ambos sexos a procesos formativos profesionalizantes y finalmente las remesas de muchos migrantes desde centros urbanos de México y Estados Unidos han reducido la relevancia de la tradicional economía de base pesquera (y marginalmente agrícola), que por su parte es cada vez menos productiva debido a la explotación excesiva de las aguas, sumada a su creciente contaminación y a la irregularidad del régimen de lluvias.
Pese a las profundas transformaciones económicas, políticas y sociales que han afectado a la comunidad de San Mateo, sus miembros muestran una notable capacidad de adaptación a los cambios en marcha, paralelamente a la determinación en la defensa de su territorio de las amenazas del extractivismo energético (resistiendo tercamente a la instalación de molinos eólicos), en la transmisión a las nuevas generaciones de la lengua vernácula y en mantener con vida las principales actividades ceremoniales públicas y privadas, cuyo conjunto constituye uno de los ejes de las formas de reconocimiento identitario. Incluso enfrentando desafíos difíciles y onerosos, los docentes y las autoridades municipales ikoots han sabido extraer inspiración de las luchas y las reivindicaciones de los otros grupos indígenas de la región y dan muestras de saber tutelar vigorosamente la soberanía territorial, la autonomía política y la especificidad lingüística y cultural que desde hace siglos los caracterizan. La MEIM está comprometida a contribuir al éxito de esa empresa a través del diálogo paritario con sus protagonistas, de compartir con ellos sus conocimientos y competencias científicos y de poner a su disposición sus archivos digitales.